Con demasiada frecuencia los condicionantes sociales nos aconsejan no movernos. Llevar adelante una iniciativa propia requiere vencer no pocas inercias y realizar gestiones tediosas.
Por eso, cuando por fin te ves con las botas puestas comienza el verdadero disfrute. Si entonces miras a tu lado y descubres un grupo cuajado de ilusión sabes que tienes por delante momentos que seguro te habrán de alimentar en el futuro y, parafraseando a Benedetti, harán que cada vez que los recuerdes "dominguee el almanaque":
La sierra de Gredos nos recibe inusualmente despejada de nieve para las fechas que corren. Establecemos nuestra residencia en el Albergue de Narredonda de Gredos donde nos dispensan un trato exquisito. Desde allí acometemos nuestra jornada en el monte: queremos subir a los Altos del Morezón (2389 m) realizando una ruta circular que transita por balcones que dan vista a valles y mesetas de las provincias de Ávila, Toledo, Cáceres y Salamanca. El grupo marcha compacto. La montaña ofrece atractivos diversos de manera que nadie quedará decepcionado, más bien todo lo contrario.
Nuestro programa concluye con una celebración religiosa en un entorno natural, así la espiritualidad ensancha sus caminos.
Sigue un álbum de fotos necesariamente extenso porque fueron muchas la emociones retratadas (y seguro que muchas más son los que cada uno de los que allí estuvieron atesora en su memoria).
Qué buena crónica y buenas fotos,una verdadera pena no haber podido acompañaros,esperamos poder hacerlo soon.
ResponderEliminarY como diría el poeta Uruguayo, "no te rindas"